
Los graffitis y las pintadas perjudican seriamente la imagen tanto de las propiedades públicas como privadas, así como los barrios y las ciudades, dando una apariencia de abandono que fomenta el vandalismo.
Los graffitis y las pintadas perjudican seriamente la imagen tanto de las propiedades públicas como privadas, así como los barrios y las ciudades, dando una apariencia de abandono que fomenta el vandalismo.